El miércoles 14 de diciembre quedó marcado a fuego en nuestro calendario. Era una fecha clave. Llevamos inmersos 3 años dentro del Proyecto Magellan y ese día íbamos a saber si continuábamos un año más o si todo el esfuerzo, trabajo y constancia invertidos habían sido invertidos en balde.
El pasado sábado 10 de diciembre el equipo de Funciona viajó a Praga con un objetivo claro en mente. Sorprender a los revisores de la Comisión Europea con todos los avances desarrollados durante el año y conseguir que The Collector. El juego que hemos desarrollado para Magellan, estuviese un año más dentro del proyecto.
Nuestra expedición, comandada por Paula Moreno y David Gil, estaba nerviosa. Nos jugábamos mucho. Este año teníamos planteado mejorar el flujo del juego, la creación de nuevas animaciones y gráficos, elementos desarrollados en QML (un lenguaje basado en JavaScript creado para diseñar aplicaciones enfocadas a la interfaz de usuario) y la implementación del Tangible Object.
¿Veis lo que está encima del smartphone?
Pues eso es el Tangible Object. En uno de los juegos de The Collector, aparece una pantalla con un ecualizador. Situamos el Tangible Object en el smartphone y lo giramos para que, de manera automática, se suba el volumen y comience a sonar una canción que habrá que averiguar.
Bueno, ¡Que os tenemos en ascuas! Les encantó. Simple y llanamente. Los revisores quedaron muy impresionados con nuestro trabajo y con todo el desarrollado por el consorcio. Tenemos que seguir trabajando en los juegos ya que hay que ir implementando nuevas funcionalidades, pero lo más importante es que hemos llegado sanos y salvos al último año del proyecto.
Os contamos un poco todo lo que tenemos pensado para el cuarto año de desarrollo. La implementación de un modo multiplayer en el que los jugadores podrán intercambiar objetos dentro del juego y el desarrollo de Geo Activity (GA), una herramienta parecida a la Realidad Aumentada pero más compleja.
Después de tirarnos flores, decidimos adoptar el papel de jardineros y mostrar gran interés en el avance del Proyecto Magellan en otros campos.
Lo más interesante que vimos fue la presentación de Dennis.
Nuestro compañero de la Technische Universitaet Graz, la Universidad Politécnica de Graz en Austria. Asombroso. Un desarrollo realmente puntero del que quedamos enamorados.
Os contamos. Lo uno, es un sistema de animación de objetos en Realidad Aumentada que usa un Hololense modificado. El usuario se pone las gafas y ve un dragón en un punto concreto de la habitación. Su objetivo es destruirlo apuntando con el teléfono lanzando bolas de fuego. Lo mejor es que ese dragón puede aprender movimientos o ser sustituido por lo que queramos. Lo otro, es un sistema que permite interactuar con una pantalla haciendo un puzzle. Con la mano en el aire, el usuario puede coger las fichas, moverlas, girarlas y colocarlas en su lugar. ¡Una pasada! Os dejamos con un par de fotos.
Tras la decisión del jurado había que celebrarlo, así que nos dimos un buen paseo por Praga buscando algún bar en el que festejar el logro conseguido. Tras un buen tiempo en busca y captura, encontramos un lugar apartado en donde nos pusieron una cerveza con la que todavía seguimos alucinando: ¡Llevaba a Darth Vader en la etiqueta!
No sabemos que nos gustó más: Praga, el éxito del viaje o nuestra botella galáctica. Lo que tenemos claro es que… ¡Queda Magellan para rato!